El Expediente de Regulación de Empleo (ERE) planteado en la factoría de Ford en Almussafes afectará a 1.622 empleados de la planta valenciana, de los cuales 626 serían bajas incentivadas y 996, despidos objetivos con preferencia de recontratación en 2027, año en que está previsto el inicio de la producción de un nuevo vehículo multienergía que fabricará la fábrica española a un ritmo anual de unas 300.000 unidades.

Este nuevo expediente de Almussafes, en la que actualmente cuenta con cerca de 4.700 empleados, supera el número de trabajadores afectados al que se cerró en abril del año pasado, que supuso la salida de 1.124 empleados a través de planes de prejubilaciones desde los 53 años y un programa de salidas incentivadas.

A esta delicada situación se llega a pesar de que Almussafes fue elegida en 2022 como la planta en que se iban a fabricar los vehículos eléctricos de Ford en Europa, con unas inversiones que la compañía ha ido aplazando.

La factoría española de Ford solo produce en la actualidad el modelo Kuga, depués de que en abril cesase la fabricación en sus líneas de la furgoneta Transit.