No pudo ser. La victoria de un español, en este caso Carlos Sainz (Ferrari), se hará esperar más allá de Monza. A pesar de salir desde la pole y mantener la cabeza de carrera durante el primer tercio de carrera, Sainz no pudo contener durante más tiempo los arreones del lider del mundial Max Verstappen (Red Bull) que en la vuelta 16 superaba al madrileño y ponía tierra de por medio.

Los tifosi mantenían entonces sus esperanzas de ver a los dos pilotos de Ferrari en el podio, pero los sueños no siempre se cumplen y superada la mitad de la carrera Checo Pérez superaba a Charles Leclerc y se lanzaba a la caza de Sainz que transitaba en segunda posición, sin inquietar a Verstappen. Fue a falta de 5 vueltas de las 51 previstas, cuando la mejor gestión de neumáticos de Red Bull, permitía a Checo  superar al español de Ferrari. 

Y cuando todo el pescado parecía vendido, Leclerc despertó la combatividad de la que a veces adolece para disputar a su compañero el último cajón del podio, en una serie de acciones no exentas de riesgo, pasadas de frenada incluidas, a las que no se puso ningún impedimento desde el muro de la Scuderia. Sainz llevó a cabo un efectivo ejercicio defensivo, ganando con merecimiento la gloria con la que los tifosi bañan en Monza a los merecedores del podio, especialmente si son pilotos de Ferrari y han sido elegidos "Piloto del Día". 

Tras Leclerc (P4) entraron los Mercedes de George Russell (P5)  y Lewis Hamilton (P6). El español Fernando Alonso (P9) se vio penalizado por el excesivo desgaste de neumáticos del Aston Martin en Monza y salvó los muebles en este GP entrando en meta en novena posición, prácticamente en las lonas.

El gran circo deja Europa para disputar dentro de 15 días el Gran Premio de Singapur que se correrá en el circuito urbano de Marina Bay domingo día 19 de septiembre.