Los concesionarios españoles de la marca recibirán en los próximos días las últimas 30 unidades del Subaru BRZ, un vehículo que ya forma parte de la historia de la marca japonesa.  

Se trata de un deportivo puro que como buen Subaru utiliza un motor bóxer de 2.4 litros y 234 CV de potencia (ubicado en una posición muy baja para optimizar el centro de gravedad), con un peso muy ligero y un tamaño compacto que inciden directamente en un manejo y rendimiento muy deportivo que han contribuido a su leyenda. 

Fuertes emociones

El placer de conducir siempre ha sido una seña de identidad del BRZ y en su última actualización se ha perfeccionado con el fin de establecer un compromiso emocional entre coche y conductor. Esto ha sido posible gracias a un aumento del 60% en la rigidez lateral de la carrocería y de un 50% de la torsional, que le hacen ser mucho más ágil y traccionar mejor en carreteras sinuosas. Además, el uso de aluminio en techo, guardabarros delantero y capó contribuyen ajustar el peso hasta los 1.289 kilos de la versión manual.

Con una perfecta combinación de ingeniería, tecnología de seguridad y características pensadas al detalle, el BRZ ofrece un valor excepcional como deportivo de raza y ya se ha convertido en un icono que pasará a la historia.

Hasta la fecha se han vendido en nuestro país 355 unidades del BRZ y ahora solo 30 privilegiados tendrán la última oportunidad de adquirir uno de estos deportivos previo pago de 43.000 euros.