El Mazda CX-60, buque insignia de la marca nipona, se revela como un duro rival de sus competidores alemanes por su diseño, tecnología, calidad y el amplio equipamiento de serie. Por si fuera poco, este CX-60 monta un motor 3.3 turbodiésel de 6 cilindros en línea y 200 CV de potencia, con unos consumos líderes de su segmento y etiqueta medioambiental ECO