El sueño australiano de Jorge Martín que había comenzado con había comenzado bien con la conquista de la pole y se había mantenido a lo largo de las 26 primeras vueltas de las 27 que constaba el GP, se convirtió en pesadilla en el último giro al venirse totalmente abajo los neumáticos de su Ducati.

La verdad es que Martín había hecho una elección arriesgada montando neumático blando atrás con la idea de tirar fuerte en la primera parte de la carrera para dosificar la goma en el tramo final. Pero el guión se cumplió hasta que a falta de cuatro vueltas el neumático empezó a flaquear y en la última vuelta se vino totalmente abajo por lo que el madrileño fue rebasado por hasta cuatro pilotos, Zarco, Bagnaia, Di Giannantonio y Brad Binder (KTM), entrando finalmente en quinta posición.

Marc Márquez (Honda), que también utilizó el blando trasero, tuvo una buena actuación durante las primeras vueltas rodando entre los de cabeza, para desinflarse progresivamente a medida que su neumático perdía prestaciones para terminar 15º. Aleix Espargaró (Aprilia) terminó en octava posición, justo por delante de Alex Márquez (Ducati) y Maverick Viñales (Aprilia) fue undécimo.

Con su segunda posición en Phillip Island, Bagnaia eleva a 27 puntos la diferencia con Martín que se mantiene en segunda posición de la provisional del Mundial. 

Pero esto todavía no ha terminado, mañana, domingo, si la climatología no lo impide, todavía teenemos la Sprint.